Clarificando la verdad con perseverancia en un centro de detención

[Minghui Net] Me he estado cultivando durante los últimos 17 años. Cuando recuerdo mi camino de cultivación no puedo expresar en palabras mi gratitud hacia el Maestro.

Aunque estaba caminando firmemente el camino de la rectificación del Fa y asistiendo a Shifu, no estaba estudiando bien el Fa, mis pensamientos rectos no eran fuertes, y en consecuencia tenía fuertes retrocesos.

El 18 de septiembre de 2008, salí con la compañera practicante A, llevando materiales para la clarificación de la verdad. Pensaba que sólo estaba hablando con mi compañera practicante, pero en realidad estaba presumiendo. Por este fuerte apego de ostentar, fui ilegalmente arrestada ese día.

La policía no pudo obtener ninguna información. Eventualmente me transfirieron a un centro de detención. Camino allí, envié pensamientos rectos. No pertenecía al centro de detención pero como ésta era la situación, decidí que iba a salvar seres conscientes antes de irme.

Estaba en una celda con una docena de internas, que estaban ansiosas por saber por qué estaba allí. Les conté que practicaba Falun Dafa, un práctica avanzada de auto-cultivación de la Escuela Buda que enseña a la gente a ser buenas personas y también las ayuda a estar saludables. Continué contándoles que antes de practicar sufría diversas enfermedades y ni siquiera quería vivir. después de empezar, mis enfermedades desaparecieron y me sentía como una nueva persona. 

Les dije que Falun Dafa se ha difundido en todo el mundo, y que el partido comunista chino (PCCh) ha perseguido irracionalmente a buenas personas, arrestándolas, golpeándolas e incluso asesinándolas. Les expliqué a las internas que la propaganda que veían por televisión era una gran mentira, y que la auto-inmolación de la plaza Tiananmen fue un fraude armado por el PCCh para difamar a Falun Gong. Todas escucharon con atención. 

Al dìa siguiente, me desperté a las tres de la madrugada y completé los 5 ejercicios frente a la cámara de seguridad. Todos los demás se despertaron a las seis aproximadamente. 

Les expliqué a las internas que al creer en el PCCh estaban en el mismo "tren del PCCh" cuyo destino final era el abismo. Les aconsejé que se bajaran antes de que sea demasiado tarde. Sintieron curiosidad y me preguntaron cómo podían hacerlo. Les dije que el Cielo eliminaría al PCCh y que debían renunciar al partido y a sus organizaciones afiliadas. les expliqué que sería igual si usaban su nombre real o un sobrenombre, lo importante es que la decisión viniera de su corazón. Luego, ese día, muchas se acercaron y me dieron sus nombres para que las ayudara a renunciar al partido.

Ese mismo día fui transferida a otra celda, donde había adictas y prostitutas. Intenté aclararles la verdad, pero me insultaron y no escuchaban. Entonces, traté de pensar de qué otra manera podía salvarlas. Envié pensamientos rectos para eliminar el mal que estaba evitando que escucharan.

Luego decidí contarles algunas historias. Les conté la historia de la sangre de cordero: cuando Dios eliminó a sus enemigos, las casas marcadas con sangre de cordero estuvieron a salvo. Les conté algunas más. La celda estaba en silencio y todas escuchaban.

La interna Xiao A vio que un guardia se acercaba. Se apuró a quejarse porque tenía constantemente que ir al baño y quería saber qué podía hacer. Otras también estaban descompuestas y querían llamar la atención del guardia también. Sin saber qué hacer, el guardia me señaló y dijo: "pregúntenle a ella, las puede ayudar".

Les dije que vayan al baño y luego se acuesten directamente y reciten "Falun Dafa es bueno; Verdad, Benevolencia, Tolerancia es bueno". Siguieron mis consejos y sus voces se escuchaban en todo el edificio; les dije que siguieran recitando hasta dormirse.

A la mañana siguiente, muchas me dijeron que estaban muy bien. Xiao A dijo: "¡Falun Dafa es magníico!". Me pidió mi número de teléfono para que le enseña a practicar Falun Dafa al ser liberada. También dijo que quería dejar de usar drogas.

Xiao B ya no quería ser prostituta y también quería aprender Falun Dafa. Al escuchar eso, otras gritaron: "Quiero aprender también, ¡quiero aprender!". Estaba contenta de que pudieran salvarse.

Al día siguiente conocí a la doctora del centro de detención. Le clarifiqué los hechos sobre Dafa y la ayudé a renunciar al PCCh. Me dijo que su madre, de 80 años, practicaba Falun Dafa anteriormente y había recuperado su salud por eso. Cuando empezó la persecución, sus hijos tuvieron miedo e impidieron que siguiera practicando. Hoy, la mamá tenía cáncer de pulmón y sus hijos estaban arrepentidos por su actitud.

En el centro de detención había tres celdas de mujeres. Les aclaré la verdad sobre Dafa a todas las internas en esas celdas en diez días. Fue un arreglo de Shifu, sólo llevé adelante esa tarea. 

Fue como Shifu dijo: 

 "De hecho, lo que quiere hacer Shifu no es para nada por un pensamiento y ya está, tengo que pavimentar muchísimo, lo cual ustedes no ven; esos dioses también están haciendo lo mismo. Todo está pavimentado, lo que falta es lo que tú haces; pero simplemente no puedes dar ese paso" (Los dafa dizi tienen que estudiar el Fa, Washington 2011).

¡Gracias Shifu por sacarme del infierno, por limpiarme y salvarme misericordiosamente!

 

 

Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2014/2/7/145276.html