(Minghui.org) Me diagnosticaron un cáncer de mama en mayo del 2012. Mi marido y yo gastamos los ahorros de toda la vida en el tratamiento, pero nos sentíamos felices de que el cáncer finalmente remitió.

Pensaba que la vida está llena de sorpresas. Mi marido y yo montábamos en moto un día de julio de 2014 cuando fuimos atropellados por un vehículo de tres ruedas. Sufrí fracturas en la clavícula y muñeca.

Los exámenes demostraron resultados terribles: no solo volvió mi cáncer de mama, sino que se extendido a mis pulmones.

Justo cuando más desesperada estaba, mi cuñada llegó de fuera de la ciudad a visitarme, y sin perder más tiempo en el hospital me fui a su casa para aprender Falun Gong.

Me aseguró: “¡Solo Falun Gong puede salvar tu vida!”.

Sabía que ella se había recuperado completamente de sus difíciles enfermedades después de comenzar a practicar  Falun Gong. Ahora con mi cáncer, sentía envidia de su rostro radiante y su fortaleza física.

Después fui con mi cuñada al sitio de práctica, ella y otros practicantes me leyeron libros de Falun Gong y pusieron las lecciones de audio del Maestro. También enviaron pensamientos rectos para limpiar las cosas negativas en mi cuerpo.

En solo dos días, el dolor en mis pulmones disminuyó y de la misma manera la hinchazón por el accidente. También era capaz comer y beber con normalidad además de sentirme con más energía.

Estaba sin dolor ni enfermedades en una semana. Mi cuerpo entero estaba increíblemente ligero.

Falun Gong me salvó. Fue el Maestro el que me dio otra oportunidad en mi vida. Desde lo más profundo de mi corazón, les digo a todos: “¡Falun Dafa es bueno! ¡Vedad-Benevolencia-Tolerancia es bueno! ¡Gracias al Maestro por salvarme!”.