(Minghui.org) Mi padre empezó a practicar Falun Gong en China, cuando yo era joven. Me sentí atraído por la música tranquila y los movimientos elegantes de los ejercicios.

Después de que empezó a practicar Falun Gong, mi padre se volvió una mejor persona. Por eso, mi madre lo apoyó y luego ella empezó a practicar Falun Gong también. En 2011, yo comencé a practicar Falun Gong. Cuando, en agosto de este año, aclaré los hechos acerca de la práctica junto con mi padre, sentí la urgencia de decirle a la gente la verdad sobre Falun Gong. Este sentimiento se volvió aún más fuerte después de que mi padre fue arrestado recientemente. 

Mi padre se convirtió en un hombre nuevo

Antes de volverse un practicante de Falun Gong, mi padre era agresivo, intolerante e irritable. Tomaba mucho y peleaba con todo el mundo sobre asuntos sin importancia. Pero, después de que empezó a cultivarse, llegó a ser alegre, amable y atento. La vida en familia mejoró, porque todos nos llevábamos bien. Mi madre y yo estábamos fascinados por el poder milagroso de Dafa.

Un día de invierno, mi padre y yo fuimos a ver una película. Mientras estábamos comprando los boletos, dos hombres jóvenes, hostiles y borrachos caminaron hacia nosotros y comenzaron a maldecir y empujar a mi padre. Mi padre me hizo rápidamente para atrás, para protegerme con su cuerpo. Estaba tranquilo, rodeado por los transeúntes, y no respondió a la provocación. Los hombres se fueron cuando los guardias de seguridad intervinieron.

En el camino de regreso a casa, le pregunté a mi padre: "Esos hombres no parecían buenas personas. ¿Por qué no te defendiste?". Él dijo: "Los principios de Falun Gong dicen que un cultivador no devuelve el golpe al ser golpeado, ni las injurias tras ser injuriado. El autocontrol es importante".

Al percibir que no estaba totalmente convencido, me contó una historia sobre Han Xin (韩信), que demuestra benevolencia. Este hombre fue un gran general durante la dinastía Han. Fue desafiado por un hombre quien lo provocó a cortarle la cabeza. Han Xin no lo hizo, porque matar era un crimen. Así que el hombre lo desafió a arrastrarse entre sus piernas. Sin preocuparse por ser humillado públicamente, Han Xin realmente se arrastró entre las piernas de este hombre. Más tarde, Han Xin fue nombrado general.

Volviéndose un practicante de Falun Gong

En 2008, mi padre fue perseguido por el partido comunista chino (PCCh), y mi familia se convirtió en el blanco del PCCh. Oficiales de la policía y agentes del comité residencial nos acosaron, utilizando todo tipo de excusas. Mi padre estuvo a punto de ser arrestado muchas veces. No podía entender por qué el PCCh podría arrestar a ciudadanos que vivían según los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia para ser buenas personas.

Estaba intrigado por el hecho de que tantas personas todavía estaban practicando Falun Gong, a pesar de la persecución sin precedentes.

En 2011, empecé a leer el libro Zhuan Falun y me quedé asombrado al encontrar las respuestas a las preguntas que había tenido por largo tiempo. Lamenté no haber leído el libro antes. Me quedé despierto toda la noche para terminar de leerlo. Desde entonces, estuve aclarando los hechos acerca de Falun Gong.

Con el tiempo, me di cuenta que había cambiado. Pude abandonar muchos apegos, tales como tomar ventaja de la gente, pereza y envidia.

Después de empezar a cultivarme, me preocupé por la gente que no conoce la verdad sobre Falun Gong. También, sentí pena por quienes persiguen fortuna y fama personal e ignoran esta práctica preciosa de cultivación. Aunque soy un practicante nuevo, estoy decidido a decirle a la gente que Falun Gong es bueno.

Mi padre arrestado recientemente

Regresé a China durante las vacaciones de verano de este año. Mi padre y yo salimos juntos a esclarecer los hechos sobre Falun Gong. En la tarde del 10 de agosto, mientras estábamos hablando con un vendedor de verduras, una mujer de 60 años vino corriendo hacia nosotros, agarró la mano de mi padre y gritó: "¡Son practicantes de Falun Gong! ¡Llamen a la policía, rápido! Los he seguido durante mucho tiempo". Otros dijeron: "¡Los practicantes de Falun Gong son buena gente! ¿Por qué arrestarlos?".

Cuando regresamos a casa, mi padre quiso que volviera a la escuela en el extranjero antes de lo previsto originalmente, para evitar ser perseguido por el PCCh. Tristemente, mi padre fue arrestado ilegalmente unas semanas después de que salí de China.

Esta experiencia con mi padre me hizo darme cuenta de cuán cruel es la persecución que enfrentan los practicantes. Todo lo que ellos quieren es decirle a la gente que Falun Gong es bueno. Me alegra que más y más personas han comprendido la verdad. También siento pena por aquellos que han sido perseguidos por el PCCh.

Versión en inglés:   http://en.minghui.org/html/articles/2014/11/11/146799.html