(Minghui.org) Nota del editor: Muchos practicantes de Falun Gong liberados de los centros de detención del régimen comunista chino, de sus comisarías, contaron cómo fueron torturados de diferentes maneras brutales. Este informe, el tercero de una seria de cinco sobre los métodos de tortura, describe cómo oficiales patean o se paran sobre los practicantes rutinariamente con zapatos de cuero pesado.

Es muy común ver policías en las prisiones chinas o en las comisarías pateando a un practicante de Falun Gong.

Ellos normalmente usan un par de zapatos de cuero cuando patean a los practicantes, ya que hace la patada más fuerte. Sea que los practicantes son jóvenes o viejos, mujeres u hombres, los malhechores apuntan específicamente a las partes sensibles u órganos vitales del cuerpo.

Tal tipo de brutalidad resulta en daño interno del cuerpo, fracturas, y en algunos casos, la muerte.

 

Representación de la tortura pateando.

Representación de la tortura pateando.

Representación de la tortura aplastando las manos contra el piso.


El Sr. Shi Hongjie muere después que sus costillas perforan sus pulmones

Sr. Shi Hongjie.

El Sr. Shi Hongjie (史洪杰), practicante de Shandong fue brutalmente torturado en el centro de detención de Laixi por no decirle a la policía de dónde provenían los materiales de Falun Gong que tenía en su casa.

El Sr. Shi estaba haciendo los ejercicios de Falun gong la mañana del 18 de 2002, cuando varios reclusos lo arrastraron hacia fuera y lo sostuvieron contra el piso. Saltaron sobre su cuerpo y le aplastaron su pecho. Le rompieron su costilla y esta le perforó el pulmón, y murió.

El médico examinador declaró que cuatro de sus costillas se rompieron, como también un dedo de la mano y uno del pie. También tenía una hemorragia cerebral. Estaba cubierto con heridas y moretones.

 

Representación de la tortura saltando sobre el pecho.


Amputan la pierna derecha del Sr. Wang Gang después que se le rompe un vaso sanguíneo

Sr. Wang Gang.

El Sr. Wang Gang (王刚) fue sentenciado a 10 años de prisión en el 2003 por practicar Falun Gong. El 27 de mayo de 2005, en la prisión Baoding, el guardia Fan Jiali le ordenó que se arrastrara dentro de una habitación. Tan pronto como estaba dentro, Fan saltó sobre sus piernas. Hizo esto tres veces seguidas.

Los vasos sanguíneos en la pierna derecha del Sr. Wang se rompieron, y tuvo varias hemorragias sub-dérmicas. Después de recibir un tratamiento mínimo en el hospital de la prisión, los guardias se lo llevaron y lo ataron a la cama de nuevo.

Los guardias lo llevaron al hospital para darle una inyección al día siguiente. Un médico notó que las heridas de su pierna empeoraron. Fue transferido a un hospital más grande, donde descubrieron que los músculos y huesos de su pierna derecha estaban con necrosis. Sin informarle a su familia, los guardias le amputaron la pierna en el hospital Nº 1 de Baoding.

 

Los practicantes cuentan cómo los patean

Patear o pisar es solo una de los cientos de métodos que usan para torturar a los practicantes. El daño físico y mental es devastador, como muchos practicantes atestiguaron:

“Me patearon en la cabeza y perdí la audición. Mi cara se llenó de sangre”.  

“Mi rostro y ojos se hincharon, y apenas podía abrir los ojos”.

“Me pisaron la cara, lo que generó náuseas y mareo. Tenía moretones en toda la cara”.

“Me patearon la cabeza y me dejaron una herida de una pulgada en la cabeza. Perdí la consciencia y me desmayé”.

“Después de que me pisaron la cabeza, tuve un dolor de cabeza y zumbido en los oídos”.

“Me lastimaron la espina cuando me patearon y me desmayé”.

“Quedé inconsciente por un largo rato después que recibí patadas en el pecho. Un pulmón quedó lastimado, y tenía dificultad para respirar”.

“Pisaron mis senos. Me salía sangre de la boca y la nariz al mismo tiempo y me desmayé. Mis senos se hincharon y quedaron morados”.

“Me patearon y pisaron el pecho, lo que causó que se me rompan las costillas del lado izquierdo. Vomité mucha sangre”.

“Me pisaron los dedos del pie y los tobillos y aplastaron mis dedos del pie contra el piso. Todos mis dedos quedaron aplastados, negros, y sangrientos, y las uñas de ambos dedos gordos se salieron”.

 

Continuación de: Métodos de tortura: cómo los guardias torturan a los practicantes con sus manos (Parte 1 de 5)

Métodos de tortura: cómo los guardias y policías torturan a los practicantes con objetos varios de uso cotidiano (Parte 2 de 5) (Fotos e imágenes)