(Minghui.org) Cuando Wang Haijin, dueño de una panadería, fue liberado el 22 de julio de este año, no pensó que llegaría vivo a su casa. Había sufrido torturas inimaginables, incluyendo alimentación forzada, golpizas, abusos sexuales y trabajo forzado, durante los 90 días de encarcelación por su creencia en Falun Dafa, una práctica de autocultivación perseguida por el partido comunista chino.

 

Wang Haijin: foto tomada poco después de la gran inauguración de su panadería.

 

Wang Haijin: foto tomada el tercer día después de su liberación.

 

Los guardias en el centro de detención del condado de Funing ignoraron al Sr. Wang cuando se quejaba de palpitaciones, incapacidad de respirar, edema y nauseas. Tampoco lo enviaron al hospital hasta que no puedo comer ni dormir debido a que su condición empeoró. Cuando los doctores demandaron su traslado al hospital por falla cardíaca, los guardias lo dejaron abandonado en su casa.

La policía local seguía llamando al Sr. Wang para acosarlo luego de su liberación, sumanndo mayor angustia mental a su frágil estado. Fue enviado dos veces a la guardia de emergencia después de su liberación.

Finalmente, el Sr. Wang pereció ante sus problemas cardíacos. Falleció a tempranas horas de la mañana del 9 de octubre, dejando sola a su esposa con dos hijas en edad escolar.