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Durante un reciente Fahui, una practicante mencionó cómo le presentó Falun Dafa a un paciente de cáncer. Esta persona aceptó Falun Dafa y recuperó su buena salud. El paciente atestiguó el poder de Falun Dafa. La historia fue una gran inspiración para mí.

En mi camino de cultivación también he presenciado el poder de Falun Dafa y pensé en la importancia de compartir algunas de estas historias para el beneficio de los practicantes y de los no practicantes.

Empecé a practicar Falun Dafa en mayo de 1996, y a pesar de sufrir muchas tribulaciones nunca me desvié del camino de mi cultivación. Cuando me enfrenté a la presión nunca me olvidé de Shifu. Pasé cada tribulación por mi firmeza y manteniendo la fuerte voluntad de una practicante de Dafa. Bajo la protección de Shifu me he cultivado consistentemente todos estos años.

Recuperar la salud después de practicar Falun Dafa

Antes de que el partido comunista chino (PCCh) prohibiera Falun Dafa, a una autoridad de mi trabajo le diagnosticaron cáncer. Le eliminaron un tumor enorme de su abdomen inferior. Después de la cirugía le dieron medicación, recibía inyecciones diarias y le pusieron un protocolo de quimioterapia. Tenía que llevar una peluca porque perdió todo el pelo. Pasó un momento difícil adaptándose a su aspecto enfermizo. En su turno le asignaron otro trabajo. Por casualidad, su oficina está delante de la mía. Un día vino a mi oficina y debajo de la placa de vidrio que cubre mi escritorio vio “Lunyu” escrito a mano (el prólogo de Zhuan Falun). Lo leyó y preguntó qué representaba. Le expliqué lo que era Falun Dafa y le recomendé que leyera Zhuan Falun. Varios días después me pidió que le ayudara a conseguir el libro. Este fue el principio de su primer paso para entrar en la práctica. Varios meses después me visitó. Le había crecido el pelo. Dijo: “¡Dafa es tan milagroso!”, a pesar de la persecución se convirtió en una practicante firme. Hace seis años que se marchó al extranjero.

A una antigua compañera de trabajo le diagnosticaron con un cáncer de mama y le quitaron un pecho. Después de la quimioterapia, la medicación y las inyecciones, perdió su pelo. En cuanto me enteré de esto, fui a su casa y le hablé sobre Falun Dafa y que podría ayudarle. Era miembro del PCCh. Empezó a practicar Falun Dafa y recuperó su salud. Cuando la visité la siguiente vez, parecía una persona diferente, tenía toda la cabeza colmada de su pelo negro y su cara tenía una tonalidad rosada. Me miró y empezó a llorar. Dijo mi nombre y exclamó: “¡Gracias!”, le contesté: “Por favor dale las gracias a Shifu. Fue Shifu quien te dio una segunda vida”. Luego le ayudé a ella y a su familia a renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas.

A otra mujer, también antigua compañera de trabajo, le diagnosticaron cáncer uterino. Tenía que ir a quimioterapia y aplicarse otros tipos de tratamientos. La visité y le di el libro Zhuan Falun. Han pasado tres años y sigue leyendo el libro. La llamé hace poco y me dijo que ya estaba bien.

Entre los familiares de mi marido, uno de ellos me llama su cuñada mayor. Hace dos años, a este hombre de mediana edad le dio un ataque al corazón y le ingresaron en el hospital. El coste de los tratamientos era desorbitado. Había remodelado su casa y por tanto no le quedaban ahorros. Solo tenía 5.000 yuanes. El doctor le dijo que necesitaba una cirugía de bypass, que le costaría 50.000 yuanes. Su trabajo le reembolsaría 25.000 yuanes pero tenía que pedir prestado 20.000. Mi marido y yo le visitamos y le dimos un paquete. Le susurramos al oído: “En este paquete hay 20.000 yuanes y el libro de Zhuan Falun, tú decides tu futuro”. Escogió leer el libro. En siete días, salió del hospital y nos devolvió los 20.000 yuanes. Ya han pasado varios años y sigue teniendo buena salud.

Después de recibir Zhuan Falun, mi cuñado les dijo a mi hermana y a su hijo que volvían a casa. En casa les dijo que practicaría Falun Dafa. Su madre comentó: “Si eliges practicar, entonces sé diligente”. Por muchos años, trabajó muy duro. El año pasado le ascendieron a una posición oficial. Mi hermana le dice a todo el mundo “¡Falun Dafa es bueno!”.

Estas cuatro personas experimentaron el poder de Falun Dafa una vez que empezaron la práctica. Sus cambios mentales y físicos asombraron a la gente que conocían y atestiguaron el poder de Falun Dafa.