[Minghui Net] No hace mucho tiempo atrás, experimenté una prueba fatal. Sin embargo, con la protección misericordiosa de Shifu, pronto logré recuperarme y sobreviví.

El 17 de abril, mientras bajaba las escaleras, sentí la mitad derecha de mi rostro adormecerse. Rápidamente subí de vuelta, me senté en el sofá y llamé a mi hijo menor: “Por favor ven rápidamente, la mitad derecha de mi cara está adormecida”. Justo después de decir eso, la mitad derecha de mi cuerpo se adormeció. En ese momento tuve un pensamiento de que no tenía que morir en esa casa. Mi esposo murió hace diez años. También mi segundo hijo y su esposa murieron en un accidente de auto cuatro años atrás. Su hijo ahora vive conmigo, tiene 18 años y va a la escuela. Mientras pensaba que no tenía que asustarlo, perdí la consciencia.

Después de recibir mi llamado, mi hijo menor vino a casa. Me encontró tirada en el piso, inconsciente. Apresuradamente me llevó al hospital. Me examinaron y concluyeron que había sufrido un ataque al corazón. Estando en el hospital, volví a perder la consciencia. Mi cabeza estaba rodeada de botellas de agua mineral con cubos de hielo. Unos cinco o seis días después, desperté. Después de eso, algunos días estaba clara y otros con la cabeza confusa.

Perdí la memoria y no podía recordar nada. No podía reconocer a la gente que me visitaba, tampoco a los practicantes. Aunque sabía que era una practicante de Falun Gong, no podía recitar Lunyu. Sin embargo, podía recordar “Falun Dafa hao” y “Zhen-Shan-Ren hao”. Siempre que me despertaba, recitaba estas palabras.

Un día Shifu despertó mi memoria. Otros tres días pasaron, y comencé a recordar las cosas poco a poco. No podía mover mi cuerpo. Estando en la cama del hospital, comencé a mirar hacia dentro buscando las razones detrás del ataque. Resumí las siguientes razones:

Primero, no me cultivé diligentemente. Comencé a practicar Falun Gong en 1996. Este año cumplí 66. Aunque obtuve el Fa temprano, debido a las pesadas tareas domésticas y mis fuertes apegos humanos, aunque me podía iluminar a algunos principios del Fa, no podía actuar según ellos. A veces pensaba: “¿Quién puede cultivarse con éxito?”. Por eso, no estaba tomando la cultivación con seriedad. A pesar de ese pensamiento, nunca me di por vencida en la cultivación. En términos de cultivación, no era diligente, simplemente seguía a otros. No estudiaba el Fa siempre que tenía tiempo libre. Tampoco practicaba los ejercicios todos los días.

Segundo, mi apego a mi último esposo era fuerte. Mi esposo no logró cultivarse como otros practicantes desde que el régimen de Jiang lanzó la persecución a Falun Gong. En el 2000 mi esposo murió por yeli de enfermedad. Mientras estaba vivo, nuestra familia tenía dificultades financieras, así que no se vestía ni comía bien. Sentía pena por él. Después que murió, quise comprarle una tumba. Otro practicante estaba en contra de esta idea. Mis brechas fueron aprovechadas y de este modo perdí todo mi dinero en gastos médicos. Casi morí allí.

Tercero, sentí los elementos de la ostentación en mí. Solo me gustaba hablar pero no era considerada con otros. Fui parte del grupo de estudio del Fa por dos años. Siempre que entendía algo o veía algo, lo compartía inmediatamente. Me parecía que lo que entendía era correcto y por ende tenía que hacerlo. Siempre que veía las fallas de otros practicantes, lo señalaba estrictamente y con un tono duro. Ni siquiera pensaba que esto podía lastimar al otro practicante y que generaba una relación tensa. Luego me fui al otro extremo. Dejé de hablar completamente. No seguí las enseñanzas del Fa en este aspecto de mirar hacia dentro y señalar los errores con intenciones bondadosas.

Me di cuenta de que lo que causó el ataque fue la mentalidad de ostentar, como también mis fuertes apegos. Usaron esos apegos para probarme. Las viejas fuerzas intentaron sacarme. Yo estaba todo el tiempo pidiendo disculpas a Shifu: "Shifu, estoy equivocada, estoy equivocada”. Luego desarrollé un pensamiento firme: “Soy una practicante, una Dafa dizi y una dizi de Li Hongzhi. Shifu está cuidando de mí y por ello nadie tiene permitido perseguirme. Escucho a mi Shifu y lo sigo en mi camino a casa. Que todas las células y cada articulación de mi cuerpo reciten “Falun Dafa hao”.

Este incidente en realidad era una advertencia mayor. Shifu me trajo de vuelta del borde de la muerte. Desde ahora en adelante, no tengo razón para no ser diligente. Desde entonces, he mejorado día a día para llegar a un mejor estado. Mientras estaba en el hospital, clarifiqué la verdad a mis compañeros de habitación. El día 15, pensé que ya no debía estar más en el hospital. Tenía que volver a casa. Mi vida estaba en manos de Shifu. Quería salir de ahí, pero mi hijo y su esposa no estaban de acuerdo. Al día siguiente, arreglado por Shifu, vino el médico y dijo: “Camine un poco y veamos qué pasa”. Hizo unos pasos hacia atrás y yo lo seguí. Desde que entré al hospital, no me había parado para caminar. Sabía que Shifu me estaba ayudando. Caminé bastante y el médico dijo: “Párese contra la pared y apoye las rodillas en la pared y descanse la cabeza en la pared”. Me paré contra la pared. El médico dijo: “Bien, su estado es bueno. Puede irse a casa mañana. Pero no camine muy rápido hasta dentro de un mes. Necesita practicar estar parada”. Después de llegar a casa, no hice lo que me pidió el médico. Caminé normal. Me comporté como un cultivador.

Estuve 17 días en el hospital. Con la protección de Shifu, no me operaron y aun así me recuperé. Después de llegar a casa, usé tiempo para estudiar el Fa. Los practicantes vinieron a casa a estudiar conmigo. Siete u ocho días después, comencé a hacer la meditación en mi cama. Gradualmente, me podía parar para hacer los ejercicios de pie. Estaba muy débil, así que usaba la mañana para terminar de hacer todos los ejercicios. El mismo día, mi nieto me acompañó a bajar las escaleras y salir a la calle. Cuando tomamos un taxi, le clarifiqué la verdad al conductor.

Cambié día a día. Los practicantes estaban felices por mí. Necesito agradecer a Shifu, Dafa es maravilloso. Aquí también quiero agradecer a los practicantes por sus pensamientos rectos que me reforzaron y ayudaron durante un momento difícil. Cuando tuve la tribulación, el cuidado y ayuda de los practicantes fue extremadamente importante.

Lo que he entendido es realmente limitado; si hay algo inapropiado en base al Fa, por favor señalarlo.