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Comencé la cultivación en Falun Dafa en 1994. Me retiré del ejército en 1982. Me gustaba jugar. Aprendí rápidamente a jugar al ajedrez, póker y mahjong. Antes de obtener Dafa, todo mi tiempo libre lo dedicaba a jugar estos juegos. Me convertí en un adicto a jugar al póker y a mahjong. Incluso después de casarme y que naciera mi hija, continuó mi pasión por el juego.

Era bien sabido en mi entorno laboral que era un gran jugador, y tenía muchos amigos jugadores allí. Para apostar dinero, vendí todos mis Bonos del Tesoro. A menudo me gustaba estar fuera jugando toda la noche. Descuidé el duro trabajo de mi esposa y a mi hija pequeña.

Una vez en 1985, poco después de haber contraído matrimonio, un colega jugador me pidió que jugara a mahjong en vez de ir a trabajar. Acabé siendo arrestado por la policía y detenido durante 15 días. Mi familia y hermanos intentaron persuadirme para que dejara mis hábitos de juego. Mi mujer incluso me amenazó con divorciarse, pero no pude parar.

Después de un tiempo, mi cuerpo comenzó a deteriorarse debido a mi excesiva indulgencia. No me cuidaba y solo me interesaba estar jugando. Comencé a perder cabello a los 30, estaba delgado, y mi cara estaba amarilla como la cera. Desarrollé dolencia hepática a final de 1994 y fui hospitalizado.

Afortunadamente, obtuve Dafa mientras estaba en el hospital. Me cambió completamente. Me di cuenta que el propósito de la vida era volver al origen y retornar a la verdad. Los valores humanos desviados hacen que la gente persiga los placeres y el ocio a un alto coste, incluido jugar y beber. El propósito de estas cosas es alejarnos cada vez más de la característica del universo Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y hacer que los valores morales de la sociedad declinen.

Después de obtener Dafa, estaba determinado a cambiarme siguiendo los principios del Fa y trabajando para ser una buena persona. Comencé a mantenerme alejado de mis colegas jugadores, y en lugar de ello tenía más contacto con practicantes de Falun Dafa. Empecé a trabajar diligentemente, no eligiendo y escogiendo mis tareas en el trabajo. Ya no llegaba tarde a trabajar ni me iba antes. Y ya no competía con otros por fama y beneficios. También me esforcé en ser mejor marido y mejor padre.

Como comencé a seguir los principios de Falun Dafa, mis dolencias desaparecieron gradualmente, y tenía más y más energía. No había más peleas y discusiones en casa, y había un ambiente feliz.  Mi mujer recuperó la sonrisa y era maravilloso verla. 

Mi familia y yo estamos profundamente agradecidos a Dafa. No solo ha salvado mi corazón y mi alma, también a mi familia.

Manteniendo mi fe en medio de la persecución

El 20 de julio de 1999, Jiang Zemin, el entonces líder del régimen comunista y malvado partido comunista chino (PCCh) comenzó a perseguir a practicantes de Falun Dafa. Desde que la persecución empezó, he estado mucho tiempo en centros de detención, campos de trabajo forzado y centros de lavado de cerebro.

El régimen comunista no solo me ha perseguido físicamente con todo tipo de torturas, también económicamente.

Cuando fui enviado al campo de trabajo forzado la primera vez en 1999, los administradores de mi lugar de trabajo me despidieron. Mi mujer fue despedida al mismo tiempo, así que no teníamos ingresos. Tuvo que realizar trabajos ocasionales para llegar a fin de mes, para mantener a nuestro hijo y visitarme en el campo de trabajo.

Estos años han sido difíciles. Pero no importa cómo la maldad me ha perseguido, no pueden cambiar mi creencia. Mi vida pertenece a Dafa -nada puede cambiarlo.

Mi mujer ha superado muchas tribulaciones como resultado de la persecución. Cuando estuve en varios centros de detención y campos de trabajo, muchos de nuestros parientes y amigos tuvieron miedo por mi mujer y trataron de convencerla para que se divorciara de mí, por su felicidad y el futuro de nuestro hijo.

Mi mujer no les escuchó, incluso cuando su vida era extremadamente dura. No solo no me dejó, sino que también comenzó a cultivar Dafa en 2006. ¡Es tal el poder de Dafa y la compasión, la infinita compasión de Shifu!

Mi esposa tomó el camino de la cultivación porque fue testigo de la bondad, compasión y generosidad de muchos practicantes de Falun Dafa. También ha sido testigo de mi transformación de un enfermo y egoísta jugador a una persona saludable y entusiasta. Incluso después de sufrir tortura, mantuve una posición recta y noble. Todo esto me hizo creer firmemente en Falun Dafa, y creer que la justicia prevalecerá.

Ahora toda mi familia se cultiva en Falun Dafa. Nos estamos cultivando diligentemente y mejorando juntos para seguir a Shifu a casa.