Dichos chinos: perder al amanecer, ganar al atardecer

Esta expresión nos enseña a comprender más profundamente el significado de las derrotas y los triunfos a lo largo de la vida

Chengyu es un dicho popular que significa perder al amanecer, pero ganar al atardecer y los caracteres que lo representan son los siguientes: 失之东隅, 收之桑榆.

Dongyu se refiere al Oriente, donde nace el sol. Sangyu es una morera y aquí sugiere una puesta de sol vista a través de las ramas de la morera, o simplemente al atardecer.

Esta expresión está relacionada con cómo transcurren las pérdidas y las ganancias en la vida y que por una pérdida anterior, uno puede ser compensado más adelante. Podemos perder en un lugar, pero ganar en otro, lo que sugiere que no se debe poner demasiado énfasis en la pérdida y la ganancia.

Pérdida y ganancia de un general

El ideograma chengyu se origina de una anécdota de uno de los generales del emperador Liu Xiu. Tras su coronación como emperador de Han Oriental, Liu Xiu envió al general Feng Yi para conquistar las regiones occidentales y derrotar al ejército de Chimei.

En Huixi, Chimei tendió una trampa a los soldados del general Feng simulando estar derrotado y en retirada. Con esta estratagema, los soldados de Feng fueron derrotados con éxito.

El general Feng se replegó a su campamento y reagrupó a sus hombres. Estratégicamente, envió a las zonas controladas por el ejército de Chimei pequeños grupos de soldados disfrazados. Luego, lanzaron un ataque simultáneo desde afuera y desde dentro del campamento del enemigo. Al final, Feng derrotó completamente al ejército de Chimei en el área de Yingchi.

Más tarde, cuando el emperador Liu Xiu evaluó esta misión militar en la corte imperial, dijo que si bien el general Feng perdió la batalla en Huixi, finalmente, fue victorioso en la batalla de Yingchi, destacando que aunque perdió en un lugar, al final hubo una victoria en otro lugar. Por lo tanto, determinó que el general Feng debería ser evaluado en base a todo su mérito y en consecuencia ser recompensado.

Desde entonces, el dicho "perder al amanecer, ganar al atardecer", se emplea para referirse al sufrimiento inicial por pérdida o retroceso, sólo para ganar o ser retribuido al final.