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Tengo 57 años y empecé la cultivación en Dafa en 1998. Con la protección de Shifu y con la ayuda de mis compañeros practicantes y apoyándome en mi firme fe en Dafa y en Shifu, me he cultivado por 14 años. He resistido tribulaciones desde que empezó la persecución y me llevaron dos veces a un campo de trabajo forzado. Durante los tiempos difíciles, estaba perpleja y experimenté el dolor de eliminar apegos. Lamenté no haber hecho las cosas bien durante mis tribulaciones pero estaba agradecida luego de elevar mi carácter moral. Gradualmente me volví más madura y estoy cada vez mejor en mi camino de cultivación. Abajo expongo algunas de mis experiencias para Shifu y mis compañeros practicantes.

Mi esposo tenía mal carácter, y peleábamos durante años por nimiedades. Algunas veces él me pegaba. Nuestros estados mentales y culturales diferían mucho, y no teníamos nada en común. Antes de empezar mi cultivación, pensé que me iba a divorciar de él o separarme ni bien nuestra hija se fuera a la universidad. Unos meses antes de que ella entrara a la universidad en 1998, aprendí Dafa, lo que cambió mi vida por completo. Luego de empezar a cultivarme en los primeros años era capaz de ceder ante mi marido cada vez que tenía conflictos con él. Hacía lo mejor para contenerme, pensando, “Me estás ayudando a cultivarme. Me estás dando de (virtud).” Pero la situación empezó a ponerse peor y peor, y sus palabras recomenzaron a ser más y más difíciles de tolerar. Era exactamente lo que decía en Zhuan Falun “si a uno no lo irrita hasta lo profundo del corazón, no vale.” No lo podía resistir y pasaba de reírme a llorar, comenzaba a pelear con él y no podía pasar las tribulaciones. Algunas veces se ponía molesto por un asunto trivial y otras veces  se enojaba sin razón aparente. Yo sabía que todas eran oportunidades para que elevara mi xinxing. No debería devolver el golpe cuando era atacada o contestarle cuando era insultada. Pero fallé por no estar totalmente tranquila y no dejar de enojarme en cada oportunidad. No me iluminé a la situación, no miré hacia adentro y siempre pensaba que era su culpa. Mi hija me decía que yo era en parte responsable, pero igual siempre buscaba excusas. Mis tribulaciones continuaron yendo y viniendo por varios años. Era como una gran pared ante mí que no podía pasar sin importar lo que hiciera.

Un día un compañero practicante que me conocía me dijo: “Estarás casi hecha con tu cultivación una vez que pases la tribulación que te pusieron delante con tu marido.” Era cierto, no podía entender por qué esta tribulación era tan difícil de pasar. Siempre sentía que no tenía la culpa cada vez que ocurría un conflicto. ¿Por qué no miraba mis propios problemas? Shifu dice:

“Durante la cultivación-refinamiento, específicamente cuando estás lidiando con conflictos o cuando otros te tratan mal, pueden existir dos clases de situaciones: una es que posiblemente tú hayas maltratado a esa persona en tu vida anterior; sin embargo, tu corazón está muy desequilibrado: « ¿Cómo me trata así?». Pues, ¿cómo trataste tú así a esa persona anteriormente? Dices que en aquel entonces no sabías y que en esta vida no importan los asuntos de ese otro tiempo de vida; eso no va de ninguna manera. Además, hay otra cuestión: durante los conflictos, está involucrada la cuestión de la transformación del yeli, por eso, al momento de tratar los asuntos específicamente, debemos tener una actitud elevada, no podemos actuar como una persona común.” (Zhuan Falun)

Era cierto, yo había sido mala con él en el pasado, le debía. ¿Cómo podía no pagar por eso? Si no saldaba mi deuda y lo resolvía satisfactoriamente, ¿cómo podría seguir a Shifu a casa? Shifu nos dijo muchas veces que tenemos que mirar adentro nuestro cuando enfrentamos conflictos, pero yo nunca lo hacía. No sabía cómo cultivarme, sólo me miraba hacia adentro superficialmente, y no intentaba cultivarme. Esta vez me tranquilicé y realmente miré dentro de mí. Descubrí que mi tono de voz cuando le hablaba a él no era amable, y tendía a mirarlo con desprecio. Algunas veces no miraba las cosas desde su punto de vista; no me importaba mucho; nos faltaba comunicación; por lo general yo era demasiado estricta y lo forzaba a compartir mis opiniones. Cuando descubrí todos estos malos apegos, y gradualmente pude cultivarme para deshacerme de ellos, mi esposo ya no se enojaba, y nuestros conflictos se resolvieron. La familia entera se volvió armoniosa.

Sólo en ese momento me di cuenta verdaderamente de lo maravilloso que es mirarse adentro. Mirarse adentro es realmente una herramienta poderosa. Es una herramienta que nos dio Shifu para eliminar fantasmas y demonios y así avanzar. No podemos ver o tocar esta arma, pero está siempre en todo momento, mientras seamos capaces de mirar hacia adentro en cada ocasión, estar tranquilos al enfrentar cualquier problema o crítica que otra gente pueda plantear y corregirnos si es necesario. Mírense internamente cada vez que tengan un conflicto y usen la herramienta de “mirarse adentro” en todas y cada una de las ocasiones, y entonces todas las tribulaciones en su camino de cultivación serán fácilmente resueltas.

En 2006 mi compañía ordenó unos equipos. El gerente me indicó que como era responsable de las finanzas trabajara con un subgerente a cargo. Contactamos varios proveedores, seleccioné uno y firmé un contrato con ellos. Más tarde el vendedor del proveedor me trajo 10.000 yuanes como regalo pero no los acepté. Al día siguiente me trajo el dinero a mi casa y me dijo que todos lo hacían. Si no lo aceptaba, el subgerente tampoco lo aceptaría. Entonces me dejó el dinero. Más tarde comuniqué la situación a mi gerente, quien me sugirió quedarme con el dinero.

Pasó un año y continuaba sintiendo que no debería haber tomado el dinero y lo quería devolver. No había ganado ese dinero. No debería actuar como una persona común. Una persona común persigue fama y beneficios y yo no debería ser así. Estos son exactamente los apegos que los practicantes debemos eliminar. Comparando mi actitud con el estándar de Dafa, hice pensamientos rectos de inmediato y sentí que necesitaba devolver el dinero. Inmediatamente llamé al vendedor para devolver el dinero. Estaba sorprendido de saber de mí. Me dijo, “¿Qué pasó? ¿Hay algún problema?” Le dije, “Nada está mal. Soy una practicante de Falun Gong. No puedo aceptar su dinero. Por qué no me dice su número de cuenta así le puedo transferir el dinero.” Al día siguiente me llamó luego de recibir el dinero y me dijo, “Eres demasiado buena.” Tomé esta oportunidad para aclararle la verdad acerca de Falun Gong y le dije que recitara “Falun Dafa es bueno. Verdad – Benevolencia – Tolerancia es bueno,” así estaría a salvo cuando se enfrentara con tribulaciones. Más tarde le envié algunos mails para decirle la verdad acerca de Dafa y le pedí que renunciara al partido comunista chino (PCCh) y sus organizaciones asociadas,  

Por medio del trabajo yo había conocido a alguien fuera de la ciudad, pero no nos contactamos por aproximadamente doce años. Luego del gran terremoto de 2008, me buscó por todas partes preocupándose por mi integridad, y me encontró a través de varios intermediarios. Sentí que él tenía una relación predestinada y que el Shifu había arreglado que escuchara la verdad y fuera salvado, así que concertamos una cita para encontrarnos. Le dije que había aprendido Dafa en 1998 y que no había tomado ni una pastilla desde entonces. Estaba muy saludable y cómoda y mi cuerpo y mente estaban completamente relajados. Le dije que Falun Gong es una práctica avanzada de cultivación de la escuela budista y que cultiva  la Verdad – Benevolencia – Tolerancia, que se ha diseminado en cientos de países alrededor del mudo y que millones de personas lo están practicando, que Falun Gong está siendo perseguido por el PCCh en China desde 1999, y le aclaré la verdad acerca de la persecución. Le di algunos materiales informativos para que leyera en su casa. Me habían dicho que era un profesional en los servicios armados y un miembro del PCCh, así que le hablé acerca de renunciar al PCCh y lo insté a que lo hiciera. Me dijo, “Entiendo lo que dices. Iré a mi casa y leeré los materiales, pero por favor no me vuelvas a decir nunca más que renuncie al PCCh.” Luego nos encontramos un par de veces más. Aceptó los materiales informativos, pero en cada oportunidad me pedía que no le mencionara la renuncia al PCCh.

Pasaron un par de años. Cuando lo volví a encontrar el año pasado me contó que había estado involucrado en dos accidentes de autos en el mismo mes. En ambas ocasiones estaba manejando una motocicleta y fue golpeado por un gran camión siendo lanzado por el aire a varias yardas de distancia. Sintió un leve dolor cuando se levantó. El conductor le preguntó que cómo estaba y lo quería llevar al hospital. Le dijo, “Estoy apurado trabajando. ¿Por qué no me da su número de teléfono y lo llamo si lo necesito”. Su dolor se había ido al día siguiente y no sintió más molestias. Dijo: “No podía entender cómo pude salir prácticamente ileso de dos accidentes. (Tenía más de 60.) Mi familia y amigos se preguntan lo mismo. ¿Puede ser verdaderamente que el amuleto (1) que me diste funcione?”  Le dije: “Fue por que tuviste un pensamiento recto, creyendo que Falun Dafa es bueno. Funciona si crees en él”. M respondió: “Lo llevo conmigo desde que me lo diste. También pasé la información de Falun Gong a mis parientes y amigos”. Le dije: “Hay una cosa más. ¿Por qué no renuncias al PCCh?” Esta vez él estuvo de acuerdo. Me expresó: “Ahora sé que le estoy pidiendo a lo divino que borre mi conexión. Sólo renunciando al PPCh uno puede estar a salvo. Le voy a pedir a mis parientes y amigos que también lo hagan”. Me pidió una copia de Zhuan Falun y algunos materiales con información. También me pidió un par de amuletos para darles a sus amigos. Este último julio me pidió que le diera el video de la práctica, un DVD de Shen Yun, volantes y amuletos. Más tarde me pidió 100 amuletos para sus amigos diciéndome que quería ayudar a aquella gente con relación predestinada a escapar a la gran calamidad. De hecho, en el proceso de aclarar la verdad y salvar a la gente el Shifu ha arreglado todo. Todo lo que necesitamos hacer es ser diligentes.

Después de más de 10 agitados años de cultivación durante los cuales me caí muchas veces, he ido eliminando mis apegos poco a poco, y pasando tribulaciones una atrás de otra. Viendo mi firme creencia en Dafa y en el Shifu, Él me ha guiado a pesar de no haber sido diligente. Todavía estoy muy lejos de lo que el Shifu requiere que sea. Todavía no he eliminado por completo mis nociones humanas y mi coraza humana. Todavía tengo temores cuando le aclaro la verdad a la gente acerca de Falun Gong y validando el Fa, y me he perdido de salvar a mucha gente predestinada. A través de estos años de cultivación, me he dado cuenta que cuanto más fuertes son las nociones humanas y los apegos, más problemas uno va a tener. Si uno tiene a Dafa en su mente y se aferra a los pensamientos rectos, no habrá prueba o tribulación que no se pueda pasar. 

Llegamos a este día después de una espera de millones de años y de innumerables reencarnaciones. Shifu nos encontró en este mundo humano y nos ha limpiado con Dafa, así podemos ayudar a despertar seres conscientes. Shifu ha tenido que hacer mucho esfuerzo y resistir mucho sufrimiento para convertirnos de una persona común llena de yeli a un Dafa dizi. Todo lo que podemos hacer para compensarlo es ser diligentes y más diligentes. Hagamos buen uso del escaso tiempo que queda y trabajemos duro. Hagamos bien las tres cosas y salvemos seres conscientes así podremos cumplir nuestras promesas prehistóricas y estar a la altura de la salvación del Shifu.

Nota: (1) Amuletos – En China los practicantes a veces aclaran la verdad dándole a la gente alguna cosa pequeña para usar o para cuidar, con inscripciones de algunas palabras que les recuerden las bondades de Dafa.