[Minghui Net] Nota de los editores: Tanto en la cultura occidental como en la china, el principio de la retribución del yeli (karma), es decir, responder por las acciones de uno, es ampliamente aceptado. La enseñanza fundamental de Falun Gong es la característica del universo, “Verdad-Compasión-Tolerancia”. El universo recompensará las acciones que están en armonía con este principio, mientras que las acciones como golpear, torturar y asesinar a personas producirán retribución del yeli. Dicho de otro modo, los actos buenos serán recompensados con el bien, mientras que los actos malos recibirán la retribución debida. Los artículos como éste tienen el sentido de ser un recordatorio compasivo de este principio para aquellos que cometen fechorías. Mientras muchos de los que persiguen a Falun Gong están meramente “cumpliendo órdenes”, la ley universal requiere que ellos también se responsabilicen de sus acciones, y que únicamente cambiando el curso de sus malas acciones podrán escapar de la retribución.

 

Desde 1999, un policía llamado Chen Haiyin del condado de Gucheng, provincia de Hebei, ha estado participando activamente en perseguir a practicantes de Falun Dafa, siempre tomando la delantera en arrestar y detener practicantes.

El centro de detención del condado de Gucheng retiene cientos de practicantes de Falun Dafa, y la mayoría de ellos tuvieron que soportar torturas y golpizas de la mano de Chen. Muchos practicantes le explicaron la verdad detrás de la persecución a Falun Dafa, pero él se negó a escucharlos y continuó golpeándolos. Un practicante de 50 años de edad llamado Zhang Guizhi fue golpeado tan severamente que su rostro quedó deforme. Todas las mañanas, Chen Haiyin golpeaba y maldecía a quien fuera que estuviera haciendo los ejercicios de Falun Dafa. El que no dejaba de practicar, era arrastrado afuera de la celda, forzado a arrodillarse o quedarse parado mientras recibía una golpiza.

Chen Haiyin antes trabajaba exclusivamente en el centro de detención, pero debido a su rol en la persecución, regularmente lo asignaban al buró de seguridad pública. No había nada que lo frenara de arrestar, golpear y robar a los practicantes de Falun Dafa. Los golpeaba maliciosamente y con mucha crueldad a los que se rehusaban a renunciar a su creencia.

Chen Haiyin cometió enormes pecados en la persecución a los practicantes de Falun Dafa, y fue castigado por los Cielos. En 2011 renunció a su trabajo porque se sentía muy enfermo. Su rostro estaba amarillo, y perdió el apetito. Los practicantes de Falun Dafa una vez más le dijeron que Falun Dafa es bueno, y que Zhan-Shan-Ren es bueno. También le dijeron que si tenía pensamientos positivos sobre Falun Dafa, podría ser salvado. A pesar de sus esfuerzos, Chen Haiyin se negó a escuchar y una vez más los maldijo. Su salud declinó gradualmente y murió el 29 de agosto de 2011.