[Minghui Net] El 3 de octubre, 106 congresistas firmaron una carta “Estimado colega” dirigida a la secretaria de estado Hillary Clinton, expresando sus preocupaciones por el tema de la sustracción forzada de órganos en China, y pidiendo al Departamento de Estado hacer pública cualquier información  que puedan tener sobre este tema tan delicado. La carta fue impulsada por los diputados Robert Andrews (D-NJ) y Chris Smith (R-NJ) y se distribuyó en la Cámara.

A continuación la carta:

一百零六位美国国会议员致国务卿的联名信,要求公开中共活摘器官罪行

 

La carta a la secretaria de estado

Estimada colega:

El trasplante de órganos es uno de los grandes avances en la medicina moderna. Es un procedimiento que puede y ha salvado miles de vidas. Es un éxito, sin embargo, esto depende de la disponibilidad de órganos compatibles. Los médicos en los Estados Unidos y alrededor del mundo, están cada vez más preocupados por las presuntas  prácticas amorales  de obtención de órganos y de los abusos de los trasplantes en el extranjero. Esto no puede ser más cierto que en China, donde las serias denuncias sugieren que están sucediendo abusos inimaginables.

En 2001, el Dr. Wang Guoqi, médico chino, testificó ante la Cámara de EE.UU. del sub-Comité de Representantes de Relaciones Internacionales en operaciones internacionales y derechos humanos acerca de su implicación en la sustracción de órganos a reclusos ejecutados en China. Desde entonces, se han ido presentado otras denuncias, incluyendo el reciente testimonio dado el 12 de septiembre de 2012, titulado: “Sustracción de órganos a disidentes religiosos y políticos del PCCh”, implicando hospitales chinos y doctores en la práctica de sustracción forzada de órganos a prisioneros, según el informe, se incluyen practicantes vivos del movimiento espiritual Falun Gong, uigures, tibetanos y cristianos.

Vamos a enviar la siguiente carta a la Secretaria Clinton pidiendo más información sobre qué conocimientos tiene el departamento de estado acerca de los abusos de trasplantes en China y solicitando que se una a nosotros en esta importante campaña.

Por favor contactar con Adrienne Izzo en la oficina representante de Andrews al 5-6501 o al correo electrónico adrienne.izzo@mail.house.gov  por COB 20 de septiembre si Ud. desea ser añadido a la carta. (La fecha límite se ha extendido hasta el 1 de octubre de 2012)

Atentamente,

ROBERT E. ANDREWS                                         CHRISTOPHER H. SMITH

Miembro del Congreso                                            Miembro del Congreso 

La Honorable Hillary Rodham Clinton 
Secretaria de Estado 
Departmento de estado 
2201 C Street NW 
Washington, D.C. 20520

Estimada Señora Secretaria:

El trasplante de órganos es uno de los grandes avances de la medicina moderna. Cuando se realiza de acuerdo a las normas éticas, es un procedimiento que puede y ha salvado a miles de vidas. A pesar de los muchos avances en este campo de la medicina, su éxito depende de la disponibilidad de órganos compatibles. A menudo, la demanda de órganos es mayor que la disponibilidad. En algunos países, se sospecha que esa demanda ha llevado al desarrollo del mercado negro de órganos. Los médicos en EE.UU. y alrededor del mundo, están cada vez más preocupados por las presuntas  prácticas amorales  de obtención de órganos y de los abusos de los trasplantes en el extranjero. Esto no puede ser más cierto que en China, donde las serias denuncias sugieren que están ocurriendo abusos inimaginables.   

En 2001, el Dr. Wang Guoqi, médico chino, testificó ante la Cámara de EE.UU. del sub-comité de representantes de relaciones internacionales en operaciones internacionales y derechos humanos acerca de su implicación en la sustracción de órganos a reclusos ejecutados en China. Desde entonces, se han ido presentado otras denuncias, incluyendo el reciente testimonio dado el 12 de septiembre de 2012, titulado: “Sustracción de órganos a disidentes religiosos y políticos del PCCh”, implicando hospitales chinos y doctores en la práctica de sustracción forzada de órganos a prisioneros, según el informe, se incluyen practicantes vivos del movimiento espiritual Falun Gong, uigures, tibetanos y cristianos.

En febrero, Wang Lijun, asistente del alcalde de Chongqing supervisado por la seguridad pública, pasó más de 24 horas en el consulado de EE.UU. en Chengdu. Algunos dicen que está involucrado directamente en esas horrorosas prácticas de sustracción de órganos a prisioneros vivos en China. Mientras que en el consulado de EE.UU. se afirma que pudo haber divulgado información acerca de la sustracción de órganos a practicantes de Falun Gong que aún estaban vivos. Si tales evidencias se recibieron y se sacan a la luz, se podrían tomar medidas para ayudar a detener tan abominables abusos.

Por tanto, pedimos que el Departamento de Estado dé a conocer cualquier información que pueda tener relación con el abuso de trasplantes en China, incluyendo cualquier documentación que Wang Lijun pueda haber facilitado a nuestro consulado en Chengdu.

 

Atentamente,

Adrienne C. Izzo 
Compañero del Congreso
Congresista Rob Andrews (NJ-01) 
(202) 225-6501