[Minghui Net] Mi nombre es Youlian (pseudónimo), y tengo 73 años. Empecé a practicar Falun Dafa en 1997. Tenía todo tipo de enfermedades, pero Shifu me transformó  en una practicante saludable y feliz. Era analfabeta, pero Dafa me abrió mi sabiduría y pude leer casi todos los libros de Dafa excepto algunos caracteres. Agradezco a Shifu desde el fondo de mi corazón. Aunque Dafa ha sido perseguido, nunca he dudado ni de Shifu ni de Dafa. He estado caminando sin cesar el sendero de mi cultivación hasta la actualidad.

Fui arrestada y trasladada a un centro de lavado de cerebro, a la comisaría y a un centro de detención. Cada vez salía de una manera digna bajo la protección de Shifu. En 2001, sufrí la tortura más grave. Me enviaron a un centro de lavado de cerebro y mucha gente intentaba “transformarme”. Al principio, no sabía qué hacer. Después de recitar el Fa y compartir experiencias con los compañeros practicantes, me di cuenta de que esta es la manera que tiene el  mal de engañar para perseguir a los practicantes de Dafa. Shifu dijo:

 “Esclarezcan la verdad completamente, eliminen la maldad con pensamientos rectos, salven a todos los seres y protejan el Fa con firme perseverancia. (“Dafa es indestructible” de Escrituras esenciales para mayor avance II)

Después de recordar las palabras de Shifu, supe lo que tenía que hacer. El secretario del comité residencial me dijo: “Tienes que escribir la declaración de garantía, de lo contrario, no podrás volver a casa”. Le dije muy seria: “Sigo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia para ser una buena persona y no hay nada malo con  eso. Eres tú el que está equivocado y no deberías perseguirnos. Eres tú quién debería escribir una declaración para garantizar  que la persecución va a parar”. Después de eso no tuvo nada que decirme.

El secretario del comité jurídico y político me sermoneaba con el ateísmo del partido comunista chino. Recité la lectura de Shifu “Qué es la sabiduría”:

 “La gente cree que las celebridades, los eruditos y los especialistas de diversas ramas en la sociedad humana son muy eminentes. En realidad, son muy insignificantes, porque son personas comunes. Sus conocimientos son sólo ese pequeño pedacito reconocido por la ciencia moderna de la sociedad humana. En el inmenso universo, desde lo más macroscópico hasta lo más microscópico, la sociedad humana se encuentra justamente en el sitio más central, en la capa más exterior y en el lugar más superficial. La vida en esta sociedad también es la forma de existencia más baja y su entendimiento de la materia y espíritu también es muy limitado, superficial y pobre. Aunque alguien hubiese dominado el conocimiento de toda la humanidad, sería aún nada más que una persona común”. (“Qué es la sabiduría” de Escrituras esenciales para mayor avance)

Se quedó atónito e inmediatamente le dejé sin palabras.

A cualquiera que veía del personal del centro de lavado de cerebro le decía cuan bello es Dafa y cómo nos persigue Jiang Zemin y el partido comunista chino. Finalmente, bajo la protección de Shifu volví a casa sin escribir nada.

En 2007, me metieron en un centro de detención por  distribuir los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista y otros materiales de aclaración de la verdad. Cada día, recitaba el Fa, mandaba pensamientos rectos y le contaba a los demás los hechos sobre Falun Gong y les convencía para que renunciaran al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. La gente de la misma celda no se atrevía a decirme nada porque me vigilaban. Luego mandaba pensamientos rectos para hacer que el aparato de vigilancia no funcionara y se estropeaba.

Durante los Juegos Olímpicos de Beijing, el comité residencial envió a gente a vivir conmigo. Les aclaré la verdad, y les puse el video de la actuación de Shen Yun. Disfrutaron viendo el video y hasta se rieron. En alguna ocasión cantaron junto con el video y más tarde renunciaron al PCCh.

Cuando leí que Shifu nos pedía salvar a la gente, insistí en salir cara a cara para aclarar la verdad. Una vez, cuando estaba explicando los hechos sobre Falun Dafa a un hombre, me interrumpió inmediatamente y me enseñó su identificación  de trabajo. Le dije: “No importa qué rango tengas como oficial, eres una vida, y necesitas salvarla. Simplemente a través de renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas, recordando Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, puedes salvar tu vida sin gastarte ni un centavo. El problema se resolverá si estás de acuerdo conmigo”. Sonrió y asintió con la cabeza.

Un día, fui a una localidad para distribuir materiales informativos. Cuando estaba hablando, dos hombres altos me llevaron a la fuerza a la comisaría. Los policías me esposaron y me preguntaron que por qué iba a esa localidad a distribuir materiales. Calmadamente le conté  la verdad con una sonrisa y dije: “En un futuro cercano, tendrá lugar un enorme desastre y mucha gente perderá la vida. Lo que estamos haciendo es salvar vidas. Cuidamos de ustedes y de vuestra posteridad.

Los policías se quedaron sin palabras, y llamaron a otros dos agentes. Los policías me abofetearon en cuanto entré en la habitación. Chillé: “¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-benevolencia-Tolerancia es bueno!” Dijeron furiosamente: “¿No sabes quiénes somos y lo que hacemos?”, les sonreí, “No me importa quién seas. La única cosa que hago es salvar a la gente. Si quieres salvar tu vida, renuncia al PCCh y recuerda, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, Falun Dafa es bueno”. El mismo día me liberaron a las 15.00 h.

Algunos bromeaban cuando les explicaba los hechos sobre Falun Gong: “¿Falun Gong te paga un sueldo?”, le contestaba: “Estamos salvando a la gente, no queremos dinero. Nosotros sólo damos y nunca pedimos nada”. Algunas personas que entienden lo que les decía me daban dinero o cosas para agradecerme, como dejarme tomar el taxi de forma gratuita, pero siempre las rechazaba.

Shifu nos pide que nos cultivemos mejor y salvemos a más gente. He trabajado más duro y de forma más diligente para completar con mis votos prehistóricos.

Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/html/articles/2010/12/7/121818.html