[Minghui Net] Estoy en mis sesenta años. El año pasado no me sentía bien y fui a un hospital para hacerme un reconocimiento. Me diagnosticaron un cáncer cervical. Con el fin de curarme, gasté montones de miles de yuanes, pero aún así no mejoré nada. Los médicos pensaron que no había ninguna esperanza y simplemente me dijeron que me fuera a casa a descansar. Me dijeron que comiera lo que quisiera. Lo único que podía hacer era esperar la muerte.

Justo cuando había perdido toda esperanza, conocí a un practicante de Dafa, quien, al oír mi historia, me dijo la verdad sobre Dafa. El practicante también me dijo que sería recompensado si podía repetir de todo corazón y todos los días: "¡Falun Dafa es bueno!" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!"

Así, comencé a decirme estas nueve palabras todos los días: "¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!" En un mes, tuve mejorías muy evidentes en mi organismo. Recuperé el apetito: Incluso podía comer más que antes. La cara me cambió, de tener un aspecto delgado y pálido a verme con una cara más rellena y luminosa. Ya no me dolía la zona donde había tenido cáncer. Mi vida volvió a la normalidad. El gran cambio que tuvo lugar en mi cuerpo sorprendió a mi familia. Ahora todos creen en el poder de Dafa. Estoy realmente contento. Es el Maestro de Falun Dafa quien me ha salvado. Gracias, Maestro. Gracias, practicante de Dafa.

Quiero que todo el mundo conozca mi historia. Les dije a todos mis amigos y familiares: "¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno! ¡Falun Dafa puede salvar vidas! ¡Yo practicaré Falun Gong también!"

31 de agosto de 2009