[Minghui Net] Muchos discípulos de Dafa de Beijing fueron bastante afortunados de asistir a las clases que el Maestro dio, donde Él personalmente dio la clase y enseñó los ejercicios. En esas clases, el cuerpo de cada discípulo era purificado y sus pensamientos fueron mejorados. Durante ese período, experimentamos, aprendimos, y escuchamos muchas historias relativas al Maestro. Algunas historias parecían leyendas al contarlas, pero todas ellas eran reales. A través de esas historias sentíamos que realmente ignoramos cuántas dificultades soportó el Maestro y cuántas tribulaciones pasó el Maestro para salvarnos. Nosotros no podemos decir simplemente "Gracias" a tan increíble privilegio. Lo que debemos hacer es hacer lo máximo posible para tener éxito en nuestro camino de cultivación, cumplir el estándar, y llegar a ser bueno de todo corazón, lo cual es la mejor gratitud que podemos ofrecer al Maestro.


3. Un gnomo llevo agua al Maestro

Cuando el Maestro y sus asistentes empezaron a subir la colina, una mujer repentinamente se aproximó a ellos. Ella llevaba puesta una tela blanca en su cabeza y llevaba una vasija con agua. Ella sólo siguió al grupo y no dijo ni una sola palabra. Los asistentes le preguntaron si era una vendedora de agua. Ella aún no dijo nada. Ellos quisieron ayudarla a llevar el agua, pero ella no dejaría a nadie beber su agua excepto al Maestro. Ella sólo los siguió a lo largo del camino sobre la colina. Después de que bajaron la colina, la mujer desapareció repentinamente. El Maestro les dijo a todos que ella era el gnomo de esa colina.


4. Un hombre entendió un asunto serio después que el Maestro le dio una palmada

En 1993, la esposa de un antiguo discípulo en Beijing quiso divorciarse porque de él practicaba Falun Gong. Un día el Maestro y él tuvieron una comida juntos. Él bajó su cabeza y pensó mientras comían: "¿Cómo puedo tratar con ella si me divorcio porque practico Falun Gong?". Mientras estaba pensando, el Maestro vino y le dio una palmada en sus hombros. Él sintió que entendió todo inmediatamente y se sintió repentinamente iluminado.

Después, el Maestro dijo en clase: Hay veces que algunas parejas por poco se divorcian cuando uno de ellos practica gong. Muchos no han pensado el porqué de tal situación. Si le preguntas más tarde: "¿Por qué te enfadaste tanto conmigo cuando practicaba gong?", tu cónyuge no podrá explicarlo. Realmente no podrá hacerlo: "Es cierto, no debería enfadarme tanto, pero sentí tanta rabia en ese momento". En realidad, ¿cuál es la razón? Al mismo tiempo que practicas gong, tu yeli es transformado. El que no pierde no gana; lo que pierdes son cosas malas, hay que sacrificarse. ("La transformación del yeli", «Zhuan Falun»)


5. Por no perseguir la curación de su "enfermedad", una mujer recobró la salud

Una practicante asistió a la decimotercera clase, dada en Beijing. En esa clase, el Maestro dijo a todos que Falun Gong no es para curar enfermedades.

Sin embargo, esta practicante había venido a la clase con la intención de curar sus enfermedades. Antes, cuando ella practicaba otro sistema de qigong, una serpiente la poseyó. Ella no se lo dijo al Maestro. Además, no renunció a su idea de curar su enfermedad. Cuando la clase terminó, no se movió de su asiento, pensando: "Solamente me quedaré aquí y no saldré, y veré si en este mundo, usted (Maestro) puede curar mi enfermedad o no". Ella pensó que si hacia esto el Maestro vendría a preguntarle sobre su enfermedad. Sin embargo, el Maestro no le prestó atención y salió.

Al siguiente día, el Maestro dijo en clase: "Había una persona que se sentía tan enferma que se tendía boca abajo en una silla, esperando que yo bajara del podio para tratarla. No hago tal cosa. Si no puedes pasar esta prueba y ni siquiera puedes pasar una tribulación tan pequeña, ¿cómo vas a cultivarte en el futuro cuando te encuentres con muchas y grandes tribulaciones?" ("La cuestión de la búsqueda intencional", «Zhuan Falun»). También dijo que podía limpiar todas las cosas malas del cuerpo de los practicantes.

Más tarde, ella gradualmente entendió algunos principios que el Maestro enseñó. Ella se dijo a sí misma: "No quiero tener esta cosa mala (el futi de la serpiente)". El Maestro no hizo nada obvio para tratar su enfermedad, sin embargo, su enfermedad se fue.

Puede leer las otras partes de este artículo en:
Parte 1: http://www.minghui-es.org/articles/4702.html

(Versión en chino: http://www.minghui.ca/mh/articles/2004/6/24/77629.html)
(Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2004/7/14/49869.html)


Fecha de edición: 16/4/2006Fecha del artículo original: 24/6/2006