[Minghui Net] Esta es una historia acerca de una persona que, debido a que tomaba las cosas de los demás, se convirtió en un esclavo en su próxima vida para pagar lo que había robado. La retribución que obtuvo es muy conmovedora.

Durante la Dinastía Sui, Zhao Liangxiang vivía en Daizhou. Liangxiang era un hombre de fortuna y tenía dos hijos. El mayor, Zhao Meng, era un hombre honesto y gentil, mientras que el menor, Zhao Ying, era antipático y rudo. Durante sus últimos años, el enfermizo Zhao Liangxiang quiso evitar que su familia disputara su propiedad, por lo que en su herencia la dividió. Pero poco después de la muerte de Zhao Liangxiang, Zhao Ying, el menor, tomó toda la propiedad de su hermano mayor excepto por el jardín de una casa. Zhao Meng tuvo que trabajar como sirviente para vivir.

Cuando Zhao Ying, el menor, murió unos pocos años más tarde, se reencarnó como Zhao Han, el hijo de su hermano mayor. Años más tarde, el mayor Zhao Meng también murió y se reencarnó como Zhao Xian, el nieto de su hermano menor. Al crecer Zhao Han y Zhao Xian, el estándar de vida de la familia de Zhao Han empeoró mientras que la familia de Zhao Xian se enriqueció. Zhao Han era el tío de Zhao Xian, pero estaba tan desesperado que se convirtió en el sirviente de su sobrino. La gente no sabía la historia de sus vidas pasadas y por lo tanto sentían lástima por Zhao Han. Ellos decían, "Los cielos no son justos, los ricos se convierten en más ricos".

Un día la madre de Zhao Han le dijo a él, "Tu tío Zhao Ying robó las propiedades de nuestra familia, causando mucha miseria a nuestras vidas. Ahora has terminado siendo su sirviente. ¡Cuánta vergüenza trajo esto a nuestra familia!" Después de oír esto, Zhao Han estaba tan furioso que quería matar a su sobrino, Zhao Xian. Siempre llevaba un cuchillo con él y esperaba por su oportunidad.

El primer año de la Era Kai Huang, Zhao Xian planeó visitar la Montaña Wutai. Le pidió a su tío Zhao Han que lo acompañara. Cuando ambos estaban en la montaña sin nadie a su alrededor, Zhao Han tomó su cuchillo e intentó matar a su sobrino, diciendo que quería vengar la injusticia de tres generaciones. Zhan Xian corrió hacia el bosque y se escondió en un templo hecho de paja. Mientras Zhao Han lo buscaba, un viejo monje lo detuvo y le preguntó qué quería. Zhao Han declaró, "Quiero matar a mi enemigo". El viejo monje se rió fuerte, "¿Cuál enemigo? Tú eres tu único enemigo. Espera un minuto, Te contaré la historia de tus vidas pasadas. Después de eso podrás ver quién es realmente el tipo malo".

El monje les hizo recordar sus vidas pasadas: Zhao Huan era Zhao Ying, quién había maltratado a su hermano y robado sus propiedades; Zhao Xian era el humillado Zhao Meng. Después de darse cuenta de esos hechos, ambos hombres se entristecieron y avergonzaron.

El monje dijo, "Zhao Ying trajo de sus vidas pasadas riquezas y buena fortuna. Incluso si no hubiera robado a su hermano, aún así él habría sido rico. Pero maltrató a su hermano, le robó su propiedad y no era solidario. Por eso, después de la muerte, Zhao Ying fue castigado y debió pagar todos los bienes de su hermano, junto con los suyos propios, y se lo dio todo a su hermano, ahora su sobrino Zhao Xian. Él mismo también se convirtió en un sirviente pobre.

Todo esto era para pagar todo lo malo que había hecho. Zhao Meng hizo donaciones, aunque no con muchas ganas. Por ello, aunque tenía dinero, no podía usarlo. En otras palabras, toleró el maltrato de su hermano y se mantuvo pobre sin quejarse.

Por ello reencarnó en una familia rica y disfrutó de sus riquezas. En general, los efectos causales son justos. Quienquiera que cause sufrimientos a otros, eventualmente sufrirá. Zhao Huan no necesitó acusar a otros por sus infortunios, menos matar por venganza. Eso sólo sumaba más odio a la complicada cadena de retribución, haciendo de este modo más miserable su vida.

Después que los dos hombres comprendieron la historia, se dieron cuenta que no importa cuánto intenten las personas, ellos no pueden cambiar la vida de otros. Aquellos que dañan serán dañados; aquellos que ayudan a otros se ayudaran a sí mismos. Es en realidad un principio universal que ha sido demostrado una y otra vez. Ahí mismo, los dos hombres decidieron abandonar sus familias y convertirse en monjes del templo de la Montaña Wutai.

11 de octubre de 2005

Fecha de edición: 12/4/2005
Fecha del artículo original: 13/11/2005
Categoría: Foro abierto

(Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2005/11/14/66847.html)