Un anciano no tuvo miedo de dar el frente ante la dictadura y exitosamente rescata a su esposa practicante

(Sabiduriapura.org) Un día, un compañero practicante me contó una historia de cómo una persona que no practicaba Falun Gong elevó un reclamo a favor de su esposa que es una practicante de Falun Gong.

El hombre en referencia fue el propietario director de una compañía de estado. En el pasado, él abusó de su poder para obtener ilegalmente ganancias y beneficios. Este es un fenómeno común en la sociedad de hoy. Después que su esposa comenzó a cultivarse en Falun Gong, hubo un cambio drástico en su mentalidad y comportamiento. Frecuentemente su esposa asistía a las Lecturas del Maestro Li [el fundador de Falun Dafa] dadas en cinta de audio. Después de algún tiempo, este director también aprendió algunas cosas acerca de cómo ser una buena persona. Pensó que lo que el Maestro Li dice es muy verídico. Luego, él vio la fantástica mejoría de salud de su esposa después de que comenzó a practicar Falun Gong. Ella también lanzó las botellas de medicinas que había tenido por docenas de años, debido a que se tornó muy saludable y sin malestares.

La esposa de este hombre no sólo que se cultivaba a sí misma, ella le ayudó a su esposo a mejorarse. A veces si el director hacía algo inapropiado, ella le señalaba aquello. De esta forma, cambió para mejor el comportamiento del director. Ya no organizaba pomposos encuentros en su unidad de trabajo y debido a eso, le ahorraba mucho a su compañía de trabajo en entretenimientos y costosas comidas en cada año. También él dejó de tomar ventaja de su compañía. Todos los empleados le respetaban y frecuentemente alguien le alabaría por ser honesto. El director dijo: “Me comporto de esta forma por la influencia positiva que mi esposa me infunde.” Luego él propagó en su derredor acerca de las enseñanzas de Falun Gong para cultivar el corazón de uno y ser bondadoso, para elevar la moral de uno y verdaderamente ser una buena persona.

El régimen de Jiang ha abusado de su poder y persigue a Falun Gong desde el 20 de julio, 1999. La esposa del director sintió que no era justo que el gobierno persiga a gente buena. Por tanto, ella fue a Beijing para apelar por Falun Dafa en la Oficina de Apelaciones. Como resultado, quedó arrestada y la escoltaron de regreso a casa para más tarde detenerla en un centro de detención. Su esposo quedó perplejo y decidió mantenerse firme por su esposa y hablar palabras de justicia a favor de su esposa. Él fue muchas veces al centro de detención pidiendo que le liberaran. Los empleados del centro de detención le ignoraron. Por ese motivo fue a Políticos de la Ciudad y al Comité de Leyes, a la Oficina de Apelaciones y a la “Oficina 610” solicitando que liberen a su esposa. Al comienzo, no sólo que no la liberaron, las autoridades incluso le amenazaron, “Tú eres un miembro del Partido. Como oficial, ¿Te atreverías ir al gobierno central? ¿No tienes miedo de perder tu posición? El director les dijo: “Soy un anciano. Quienquiera que desee despojarme de mis funciones puede hacerlo a su antojo.” Luego le dijeron, “Si regresas a quejarte de nuevo, ¡también te detendremos a ti!” El director les dijo, “¿Arrestarme? Puedo saber a causa de qué? ¿Qué ley he violado? ¡Yo me atrevo! El jefe de la “Oficina 610” tuvo miedo de las palabras rectas de este hombre que titubeó incontrolable y no se atrevió arrestarle.

El poder de rectitud es la mejor vía para hacerle temblar al demonio. Tres meses más tarde, la esposa del director fue puesta en libertad.

31 de agosto, 2004

Fecha de edición: 26/9/2004
Fecha de articulo original: 15/9/2004
Categoría: Noticias de China
Traducido: 22/9/2004
Versión en chino disponible en: http://minghui.ca/mh/articles/2004/9/1/83081.html
Versión en ingles disponible en: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2004/9/16/52479.html