[Minghui Net] En agosto de 2004, un compañero practicante que estaba coordinando conmigo un sitio de almacenamiento de materiales informativos fue detenido ilegalmente. Un miembro de la familia movió sus libros de Dafa y casetes de audio a mi casa y me dijo que la policía lo había estado vigilando durante dos meses.

Enterarme de esto me hizo sentir temor. Pensé que si las autoridades lo habían estado vigilando descubrirían acerca de nuestro sitio de almacenamiento de materiales. Me preguntaba ¿cómo iba a poder lidiar con tantos libros, cartuchos de tinta y papel para imprimir?

En ese momento, me acordé de lo que dijo Shifu: "Sólo manteniéndose inamovibles, serán capaces de manejar todas las situaciones". (Exponiendo el Fa en el Fahui del Medio Oeste de los Estados Unidos). Pensé: "Si permanezco imperturbable, no podrán hacer nada”. Sólo moví algunos libros a casas de otros practicantes y guardé el resto en la mía. Modifiqué mi pensamiento y me aferré a una sola idea: Rescatar al compañero practicante lo antes posible.

Hablé con su esposa e hice un plan un para rescatarlo. Pero la esposa cambió de opinión muy rápidamente así que tuve que hablar con ella varias veces. Le pedí a otros practicantes que ayudaran enviando pensamientos rectos, y consulté a algunos abogados. También hablé con un conocido que trabajaba en la comisaría donde estaba detenido el practicante, y le aclaré la verdad. Por la tarde generalmente distribuía materiales de aclaración cerca de la casa del practicante detenido y de la estación de policía.

Me acuerdo del día en que fui a ver a mi conocido en la estación de policía. En la entrada me pidieron mi identificación, lo que me desconcertó un poco. Pero en el momento en que registraron mi identificación, sentí que yo era tan enorme y esos agentes de policía tan pequeños, que todo mi miedo desapareció al instante. Sabía que Shifu me había fortalecido.

Cuando me encontré con mi conocido, rápidamente le dije por qué estaba allí, ya que él sabía que yo practicaba Falun Dafa. Le pregunté si podía ayudar a que el practicante que estaba detenido allí fuera liberado.

Él dijo: “Ciertamente eres audaz para atreverte a venir aquí para hablar de Falun Gong”. Luego me preguntó por qué lo habían arrestado. Le dije que era debido a la práctica de Falun Dafa y lo insté a buscar ayuda para hacer que fuera liberado de inmediato.

Luego le hablé de Falun Dafa. Le dije que en el pasado darle comida a un monje le permitía a uno acumular virtud y que hoy en día ayudar a un practicante de Falun Gong es compensado con una enorme cantidad de virtud.

Dijo que honestamente no sabía nada al respecto pero que haría lo posible por ayudar. También me aseguró que le iba a pedir a la policía que no le pegaran al practicante.

Le dije: “Vamos a tener presente que ayudaste a un Dafa dizi, y lo que hagas te traerá buena fortuna”. Cuando salí de la comisaría, sentí de nuevo una corriente cálida saliendo de mi cabeza y pasando por todo mi cuerpo. ¡Estoy muy agradecido por la misericordiosa protección de Shifu!

Tres semanas más tarde, el compañero practicante salió del centro de detención con pensamientos rectos.