Nombre: Liu Deqing (刘德清)
Género: Femenino
Edad: 60 años
Dirección: Ciudad de Hailun, provincia de Heilongjiang
Profesión: Doctora en medicina
Fecha de la muerte: 27 de noviembre de 2011
Fecha del arresto más reciente: 10 de diciembre de 2007
Lugar de detención más reciente: Prisión para mujeres de la provincia de Heilongjiang (黑龙江省女子监狱)
Ciudad: Hailun
Provincia: Heilongjiang
Persecución sufrida: Privación del sueño, trabajo forzado, sentencia ilegal, inyecciones forzadas/administración de drogas, palizas, encarcelamiento, extorsión, limitación física, detención, prohibición de ir al baño.

 

[Minghui Net] La Sra. Liu Deqing, doctora en el hospital sanitario de Hailun, fue perseguida en la prisión para mujeres de Heilongjiang, durante más de dos años porque practicaba Falun Gong. Tenía el vientre y todo el cuerpo hinchado por la tortura y el maltrato sufrido en detención. Debido a que la prisión no quería responsabilizarse por su estado, le mandaron de vuelta el 1 de febrero de 2011, a las 23 h, a la ciudad de Hailun. No pudo recuperarse y murió el 27 de diciembre de 2011.

 

'刘德清最后被迫害得腹部肿胀,象怀孕七、八个月的孕妇一样'

La Sra. Liu Deqing, con todo el cuerpo hinchado por el duro maltrato en detención

La Sra. Liu se benefició después de empezar a practicar Falun Gong en 1996, pero ha sido condenada a dos sentencias de trabajo forzado desde 1999 cuando comenzó la persecución a Falun Gong. Posteriormente la condenaron a cinco años de cárcel en 2008. Contaba sus experiencias antes de morir y decía: “Un día en 2000 mientras estaba trabajando, varias personas vinieron a preguntarme. Después de que les dijera solo una vez, ‘Falun Dafa es bueno’, me llevaron a un centro de detención durante ocho meses. En un intento de impedirme que hiciera los ejercicios de Falun Gong, me obligaron a tirarme en el suelo, y solo me dejaban levantar para comer o ir al baño. Después mi lugar de trabajo me rescató”.

El 10 de diciembre de 2007, fue arrestada por cuarta vez, y la condenaron a cinco años de cárcel. La trasladaron a la novena división de la prisión para mujeres de Heilongjiang, en Harbin el 23 de julio de 2008. Los guardias la forzaron a sentarse en una banqueta pequeña que estaba en una baldosa y la hicieron mantenerse en esa posición durante largos periodos de tiempo. La golpeaban duramente si se movía del límite establecido por la banqueta. Decía: “La baldosa era cuadrada de unos 50 cm de lado. Me forzaron a sentarme en una banqueta desde las 5 hasta las 21 h, con las manos en las rodillas. No me dejaban salir del límite establecido de la baldosa. Le llamaban ‘postura del militar’”.

酷刑演示:码坐

Reconstrucción de la tortura: Forzada a sentarse en una banqueta pequeña durante largos periodos de tiempo

La Sra. Liu comentaba: “Había ocho habitaciones en la novena división y una docena de personas en cada una de ellas. Había un practicante de Falun Gong en cada habitación y todo el mundo te podía controlar. Zhao Tiexia estaba a cargo de las ocho habitaciones. Con una palabra o incluso una mirada de Zhao, los demás iban y pegaban a los practicantes. Si uno no seguía las órdenes, le pisaban la boca. A primera hora de la mañana del 17 de noviembre, asignaron a más reclusas para que me siguieran. Solo me dejaban llevar un jersey en el invierno y tenía que sentarme en el suelo. No me dejaron dormir por más de diez días. Los cuatro o cinco primeros días tenía la mente lúcida, pero al sexto día, estaba adormilada. Sin embargo, en cuanto cerraba los ojos, me pinchaban con un palillo o aguja, me pegaban con un palo o con un cepillo, me tiraban del pelo y me golpeaban contra la pared, también me pateaban y no me dejaban ir al baño. Si orinaba en el suelo tenía que usar mi ropa para limpiarlo. Cuando perdía la conciencia, me daban drogas desconocidas”.

Después de la administración forzada de drogas, la deposición de la Sra. Liu se volvió negra y su barriga seguía hinchándose. La concentración de hemoglobina estaba por debajo de 6 g. en ese momento y no podía aguantar el frío, aunque los guardias le obligaban a estar en el frío. Ella comentaba: “Durante el día, era fácil, pero por la noche no podía osar hacer ningún ruido puesto que había diez personas en la habitación. Tenía que soportarlo en silencio. Mi barriga y todo mi cuerpo seguía hinchándose”. Zheng, el director de guardia posteriormente la llevó al hospital para que la examinaran. Le diagnosticaron una cirrosis hepática en el estadio medio, ascitis, anemia, y hemoglobina baja. Zheng tenía miedo de que pudiera fallecer antes de año nuevo chino, el 3 de febrero de 2011. Por consiguiente, se la llevaron de vuelta a la ciudad de Hailun, a las 23.30 h, el 1 de febrero de 2011. Al no poder recuperar su salud, falleció el 27 de noviembre de 2011.

La prisión para mujeres de  Heilongjiang ha perseguido a los practicantes de Falun Gong durante muchos años, causando que muchos practicantes se queden discapacitados, y muchos de ellos han fallecido como resultado de la tortura y el maltrato. Las autoridades penitenciarias reducen las condenas a los reclusos que participan en la persecución a los practicantes de Dafa. Los animan a que los torturen con el fin de presionarles para que escriban las tres declaraciones para renunciar a su creencia. Las torturas y maltratos en la prisión para mujeres de Heilongjiang han sido los siguientes: les quitan la ropa en invierno, y luego las rocían con agua fría y las obligan a estar en el exterior ventoso. Las pinchan con agujas; les administran a la fuerza drogas; descargas con picanas eléctricas; les cuelgan objetos pesados; las esposan durante largas temporadas; las privan del sueño y las obligan a estar de pie o en cuclillas sin moverse; son confinadas en habitaciones pequeñas; colgadas de las piernas; esposadas con las manos detrás de la espalda con grilletes pesados durante 24 horas o más; las cuelgan por las esposas; la fuerzqan a sentarse en una banqueta por mucho tiempo; las pinchan en los ojos con palillos; las golpean en la cara con reglas de plástico (7-8 cm. de ancho y más de 30 cm. de largo); les prohíben el uso del baño; son forzadas a sentarse en el suelo y obligadas a leer la propaganda del partido comunista chino; son sometidas a alimentación forzada, palizas e insultos.