Nombre: Weishan Liu

Sexo: Femenino

Edad: 51 años

Dirección: Industria de maquinaria de Hanjiang

Ocupación: Profesora

Fecha del arresto más reciente: 13 de octubre de 2002

Lugar de detención más reciente: Cárcel para mujeres de la ciudad de Wuhan

Ciudad: Ciudad de Xiangfan

Provincia: Provincia de Hebei

Persecución sufrida: Encarcelada, torturas físicas, alimentación forzada, privación del sueño, inyecciones forzadas/administración de drogas

Principales persecutores: Zhiyong Fan, Li Feng

[Minghui Net](Por un corresponsal en la provincia de Hubei) La Sra. Liu Weishan, de 51 años, de la ciudad de Xiangfan, provincia de Hubei, fue gravemente perseguida y ahora está paralítica y postrada en la cama. Sus músculos se han deteriorado, habiendo perdido toda la musculatura en la parte inferior de las piernas, provocando que sus piernas tengan forma de "z" y estén deformadas. Está mentalmente discapacitada y sólo puede hablar de vez en cuando unas frases simples, tales como "quiero ir a casa".

La Sra. Liu era una profesora en la industria de maquinaria de Hangjiang (ahora empresa de material de seguridad aeroespacial). Trabajó ahí diligentemente durante muchos años, y era respetada tanto por los profesores, como por los estudiantes. Era muy conocida por ser muy simpática, y una vez fue elegida trabajadora modelo en la ciudad.

A pesar de ser una gran persona y una buena profesora, fue arrestada siete veces debido a que ella persistía en practicar Falun Gong. En un principio fue encarcelada durante cuatro años. Poco dispuesta a admitir falsamente cualquier crimen, fue torturada hasta "confesar", y luego fue trasladada a la cárcel para mujeres de Wuhan. Cuando empezó una huelga de hambre, le inyectaron unas substancias desconocidas, y al día siguiente se quedó mentalmente discapacitada.

Años atrás, la Sra. Liu tenía una salud delicada y a menudo enfermaba. Sentía que la vida era verdaderamente dura y que no podía encontrar salida. Un día, encontró por casualidad un ejemplar de Zhuan Falun, el cual respondió a todas sus preguntas sobre la vida. Experimentó las maravillas de Falun Dafa y quiso compartirlas con los demás, y ayudarles.

Después del 20 de julio de 1999, descubrió que todas las personas de su alrededor estaban siendo engañadas por las abrumadoras mentiras en los medios. Le decía a la gente que no se creyera esas mentiras.

El 14 de septiembre de 2002, la Sra. Liu fue arrestada por la policía por séptima vez cuando estaba distribuyendo materiales de aclaración de la verdad, y la trasladaron al primer centro de detención en la ciudad de Xiangfan. Después de muchas peticiones de justicia inútiles, empezó una huelga de hambre. Entonces la policía la alimentaba a la fuerza, la tumbaron, y le metieron a la fuerza un tubo en el estómago a través de la nariz. La policía mandaba a los reclusos pellizcarle, la arrastraron del pelo, la abofetearon, y desnudaron. Hicieron esto dos veces al día, durante 30 días, hasta que finalmente su salud empeoró.

Durante su detención, el director del partido, Hu Daixin, de la industria de maquinaria de Hanjiang, le dijo al personal de la oficina 610: "Esta vez no dejen que se vaya a su casa. Te pagaré tanto como necesites (para mantenerla aquí)".

El 13 de octubre de 2002, la ya débil Sra. Liu fue sentenciada secretamente a cuatro años de prisión, y el 14 de octubre la trasladaron a la cárcel para mujeres de Wuhan.

En esa cárcel perseguían a los practicantes con muchos métodos malvados, a través de coaccionar a los reclusos para torturarlos. En la sala II, Li Feng, oficial de policía puso a los practicantes inflexibles en celdas de aislamiento solitario, esposó sus manos a la espalda y los dejó solos durante días sin permitirles comer o dormir. Mientras tanto, el oficial fingía que no era consciente de nada.

Las practicantes empezaron una huelga de hambre para protestar por su trato. La policía echaba las sobras de las comidas de las reclusas en un cubo, y usaba la vieja comida podrida y la sopa para alimentar a la fuerza a las practicantes. Bajo semejantes presiones, muchas practicantes sufrieron desórdenes mentales o incluso murieron. Una doctora en filosofía de la Universidad de Beijing sufrió un colapso mental. Acabó barriendo sin interrupción el suelo de la prisión.

Para forzar a la Sra. Liu a renunciar a la cultivación, le inyectaron unas substancias desconocidas, y también la alimentaron a la fuerza con drogas desconocidas dañándole el esófago. Solo unos meses después de ser trasladada a la prisión para mujeres de Wuhan, fue considerada como discapacitada mental. Su menstruación se detuvo, sus brazos y piernas temblaban, sus músculos estaban atrofiados, y no era capaz de cuidar de sí misma. La prisión se negó a liberarla. En lugar de ello, la llevaban frecuentemente al centro médico para ponerle inyecciones intravenosas. Su vida estaba en grave peligro.

Para evitar ser culpados en caso de que ella muriera, la cárcel trasladó secretamente a la gravemente enferma Sra. Liu al hospital 364 aeroespacial, en la ciudad de Xiangfan, el 31 de enero de 2006. Dejaron su nombre en blanco en el formulario del hospital, y tenían a dos personas vigilándola todo el día. Según la gente que la visitó en esa época, la Sra. Liu estaba tan delgada como un esqueleto. Todo su cuerpo tenía calambres y estaba deformado, y sus ojos estaban apagados.

Cuando la gente fue a visitarla después del 11 de febrero de 2006, encontraron en la puerta de la habitación un cartel que decía: "Gravemente enferma, visitas no". La gente que intentaba visitarla era parada e interrogada. Practicantes locales se las arreglaron para verla y le llevaron un reproductor de mp3 para que escuchara la música de Dafa. Poco después se sentía un poco mejor, pero la enfermera jefe lo paró y se llevó el reproductor de mp3.

¿Por qué trataban tan duramente a la Sra. Liu? Se decía que el director del partido del hospital era el antiguo director de la oficina 610 de la fábrica de maquinaria de Hanjian, Fan Zhiyong, culpable de perseguirla.

Ahora la Sra. Liu está paralítica y postrada en la cama. Sus músculos se han deteriorado y está mentalmente confundida. Solo a veces murmura unas pocas palabras. La oficina 610 informó a su familia para que se la llevara a casa. Sus familiares indicaron que la Sra. Liu, que había tenido buena salud, había sido torturada hasta quedarse paralítica y discapacitada mentalmente, y se negaron a llevársela a casa.

La Sra. Liu, una honesta profesora de escuela perfectamente saludable, estuvo primero retenida en prisión durante tres años sin ningún motivo aparente. Luego, debido a que se negaban a aceptar ninguna culpa, fue torturada por los policías de la cárcel hasta que tuvo un colapso mental, y su vida corría peligro por el primer centro de detención de la ciudad de Xianfan y por la cárcel para mujeres de Wuhan.